¿Metales pesados en la comida de tu bebé?

Nuestros niñes y bebés son especialmente vulnerables y sensibles a los contaminantes que se encuentran en la tierra y en el ambiente.

Estudios de laboratorio realizados en el 2018 en California, USA encontraron que muchos cereales comerciales, granola y barritas energéticas que se venden y comercializan para niños contenían altos niveles de pesticidas y químicos tóxicos (el principal siendo glyphosate, un pesticida muy comúnmente usado en el mundo entero.)

También existen estudios en los cuales se encontraron altas cantidades de metales pesados como plomo, mercurio y arsénico en comida para bebés en especial papillas y cereales. Estos metales pueden causar daños permanentes en los cerebros que todavía no han sido desarrollados. El principal problema y lo más alarmante es que los fabricantes de todos estos productos siguen sin analizar sus productos o medir el contenido de metales pesados.

El environmental working group está trabajando junto con varias organizaciones para crear nuevas legislaciones en donde se puede controlar esto. Pero entre tanto, podemos hacernos conscientes de este riesgo y evitar darles estos alimentos a nuestros bebés y pequeñes.

Entre más gente deje de consumir y comprar estos alimentos altamente procesados y dañinos, habrá menos demanda y podremos forzar a las compañías a finalmente hacer algo al respecto.

¿Qué vas a hacer para disminuir estos tóxicos en tus niños? Cuéntame tus ideas en los comentarios de este post.

Y si te interesa leer más, el artículo completo del environmental working group aquí está el link.

La mayoría de las barritas, galletas y papas fritas están llenas de GMOs, azucar, MSGs y aditivos procesados. Un ingrediente común es el maíz transgénico, ya que además de no se un grano nutritivo también está comúnmente contaminado con varios pesticidas sumamente tóxicos. Botanas hechas con harina o aún las que son sin gluten hechas con harinas de arroz, etc. tampoco son buena opción ya que se trata de un alimento altamente procesado que ha sido robado de todo su valor nutrimental.

Trata de acostumbrarte a leer siempre las etiquetas de todo los empaques que consumas y con especial cuidado lo que les compras a tus bebés.